Un aspecto peculiar de la vida militar es su liturgia, algunos rituales que nos pueden hacer pensar que, como escribió Peláez el otro día en El Norte de Castillla cuando hablaba del aniversario del Farnesio, «no todo en la vida es dinámico. Ni tampoco voluble, ni mucho menos relativo».
Uno de esos ritos es el que hoy te traigo aquí, el de los honores a la bandera -en este caso, estandarte- que viene recogidos en el artículo 5 del vigente Reglamento de Honores Militares. Ese artículo, que te copio aquí debajo, explica el ceremonial que hay que seguir para recibir o despedir a la enseña nacional.
Y el vídeo es su plasmación gráfica, en este caso, la incorporación del estandarte a la formación militar con motivo del 375 aniversario de la creación del Regimiento de Caballería Farnesio 12 el pasado 7 de marzo.
Artículo 5. Ceremonial para recibir y despedir a la Bandera.
1. La Bandera de las unidades militares, en sus modalidades de Bandera o Estandarte, será portada por un abanderado y acompañada por una escolta de honor.
2. Para incorporar la Bandera a una formación se pondrá ésta en orden de parada y un oficial de la unidad, nombrado para el mando de la escolta, saldrá de formación y se dirigirá al lugar en que aquélla se encuentre. Al llegar frente a la Bandera, la saludará; a continuación ordenará la marcha hacia la formación situándose a la izquierda del abanderado seguido por la escolta que marchará con el arma sobre el hombro y con el cuchillo–bayoneta armado.
3. Cuando la Bandera sea avistada por el que mande la fuerza o cuando ésta alcance el lugar previsto para ello, el jefe de la fuerza, que anteriormente habrá ordenado armar el cuchillo–bayoneta, dará las voces de «A la Bandera, ¡presenten, armas!». «Soldados, ¡Viva España!», que será respondido con el correspondiente «¡Viva!». La banda y música interpretarán el himno nacional en su versión completa. En su caso también, y siempre que así se ordene, se hará la salva de veintiún cañonazos coordinada con la interpretación del himno nacional.
La expresión «soldados» podrá ser sustituida por la que convenga, de conformidad con la condición militar de los que formen.
4. Una vez que la Bandera haya ocupado su puesto en formación, el oficial de escolta mandará hacer alto, descansar armas y, si no ha finalizado el himno, presentar armas. Al finalizar el himno, el que mande la fuerza ordenará descansar las armas y el oficial de escolta, después de saludar a la Bandera, se reincorporará a su puesto en formación.
5. Durante el tiempo que la Bandera se encuentre en formación, la fuerza permanecerá con el cuchillo–bayoneta armado.
6. En los desplazamientos durante la celebración del acto la Bandera será acompañada por el oficial jefe de la escolta. En caso de que lo hiciera también la escolta, ésta marchará con el arma suspendida o al brazo.
7. Para despedir a la Bandera se seguirá el mismo ceremonial que para recibirla.
8. La Bandera no tendrá escolta cuando la fuerza a la que se incorpore no exceda de una compañía o unidad equivalente. Para acompañarla, en la recepción o despedida, se designará al oficial más antiguo de la misma que no sea su jefe, colocándose la Bandera a la derecha del jefe de la fuerza.